
Nueve consejos para evitar los celos del hermano/a al llegar el recién nacido a casa
Los celos entre hermanos, es uno de los mayores miedos de las parejas cuando llega el segundo embarazo: ¿Qué pasará con el mayor? ¿Cómo recibirá al nuevo bebé? ¿Tendrá celos?
Son miedos normales, como el miedo de no tener tiempo suficiente para el mayor y de no ser capaz de amar al segundo como al primero. Pero ya está hecho: el embarazo sigue su curso y si todo va bien nacerá un segundo bebé que llegará a casa para vivir con vosotros, así que quizás os puedan servir estos nueve consejos para evitar los celos del hermano/a al llegar el recién nacido a casa.
1. Que vaya a visitar al nuevo bebé
Que vaya al hospital, a conocer al nuevo bebé y a ver a mamá. Preguntándole cosas, hablando con él, explicándole cómo ha nacido el bebé, contándole cuánto jugarán juntos cuando el bebé crezca y ya sepa jugar, etc
2. Que mamá le lleve un regalo al mayor cuando vuelva a casa
En realidad el mayor regalo para el hermano/a mayor es que mamá vuelva a casa y que todo vuelva un poco a su cauce, pese a que en realidad todo será bastante diferente.
Por eso puede ser buena idea que mamá le traiga algún regalo especial para celebrar su vuelta a casa, que puede ser algún juego o cuento que puedan en algún momento disfrutar juntos.
También puede ir bien que, si quiere, él mismo haga algún regalo a mamá y al bebé para celebrar su llegada.
3. Buscar un momento para estar con él
Aunque resulte complicado hallarlo, tratar de encontrar un momento cada día para estar solo con él. Tanto mamá como papá deberían encontrar tiempo para disfrutar de sus dos hijos de manera exclusiva, aunque aquí manda sobre todo el bebé. Si está llorando porque quiere estar con mamá, lo demás pasa a ser secundario.
Entonces, lo que puede hacerse, es disfrutar también del mayor en presencia del pequeño (para el niño mayor es bastante revelador darse cuenta de que, incluso cuando mamá está con el hermano pequeño, puede seguir jugando, contando historias y leyendo cuentos con él).
4. Que también se hable de él
La gente vendrá a conocer al pequeño, y le harán fotos y se harán fotos con él. Esto no debería aislar al mayor, que debería ser incluido también en todas estas situaciones: que la gente hable también con el mayor, que se fotografíen también con él y con el bebé, etc.
5. Que también se le regale algo a él
Si las visitas traen algún regalo para el pequeño, un detalle para celebrar su nacimiento, estaría bien que le trajeran algún detalle también al mayor. Por si acaso, los padres pueden tener preparadas algunas cosillas (si viene alguien sin regalo para el mayor) por si toca hacer algún «rescate».
Tampoco hace falta que haya regalo en todas las visitas si el niño lo lleva bien, pero puede ser un recurso útil si ve que a todos les parece estupendo darle cosas al nuevo bebé y con él no se tiene la misma deferencia.
6. Que otros adultos pasen tiempo con él
Que el padre haga un vínculo sólido con el mayor puede ser una gran ayuda para cuando llegue el bebé. También que lo haga otro familiar, como algún abuelo o abuela, que pueda llevarse al niño al parque, al cine, a merendar, a jugar, y que en esos días complicados en que mamá apenas puede estar con él, vea que no es que nadie quiera, sino que no se puede. Y que como mamá lo tiene complicado, buscará algún hueco en otro momento, pero mientras tanto puede pasarlo bien también con otras personas.
7. Hablarle con franqueza si está preocupado
Puede haber momentos en los que de verdad se sienta desubicado y preocupado, y que llore, se queje o incluso tenga alguna rabieta. Será normal, y será un buen momento, cuando se calme un poco, para hablar de todo lo que le está pasando.
Explicarle que le entendemos perfectamente, que sabemos cómo se siente, y que no hemos dejado de quererle ni mucho menos. Que buscaremos momentos para seguir pasándolo tan bien como siempre, cuando el bebé crezca, podrán jugar un montón, pero que ahora hay que cuidarle mucho porque es muy pequeño.
8. Enseñarle fotos de cuando era pequeño
Para explicarle las necesidades del bebé puede ir muy bien explicarle algún cuento relacionado con los cuidados que requieren los bebés, e incluso cuentos sobre celos, y hacer uso de las fotos que tenemos con el mayor, de cuando era bebé.
Que se vea a sí mismo chiquitín, mamando, siendo cogido en brazos, en el suelo, incapaz de hacer nada, y que entienda así por qué su hermanito/A necesita tanto tiempo de mamá y papá. Así comprenderá también que no es una cuestión de sustituirle por el otro, sino de que todos los niños tienen una época en que son pequeños y sus padres tienen que ayudarles porque no saben hacer casi nada.
9. ¿Y si llama mucho la atención?
Puede pasar que, a pesar de todo, notemos que nos llama mucho la atención. Y esto lo puede hacer por las buenas, o lo puede hacer por las malas. Cuando digo por las malas me refiero a que se enfade, tire cosas, nos grite, se niegue a hacernos caso.
En realidad no es maldad; en realidad no lo hace para hacernos daño. Es solo su manera de decirnos que no está nada de acuerdo con lo que está viviendo y que debemos demostrarle otra vez que le queremos. Es una prueba de amor en toda regla.
A todo esto debemos sumarle el ingrediente estrella: LA PACIENCIA
En CanguroPalencia os podemos ayudar a que vuestro hijo/a esté preparado para la llegada de un nuevo miembro a la familia